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Redes: Somos reporteros de nuestra propia ( y mediocre ) vida


"Redes sociales: Donde la vida es mentira, pero con likes"

Clark Kent / Gracias a las redes, hoy todos somos estrellas de nuestro propio reality show. Eso s铆, un reality low-cost, donde el gui贸n lo escriben nuestras fantas铆as y los extras son nuestros amigos, que tambi茅n fingen.

Subimos fotos de platos de comida que ni en una c谩rcel afgana servir铆an ("Mira este arroz quemado… #MasterChefCasero"), pero con el filtro adecuado, parece cocina de estrella Michelin. Y, por supuesto, la foto frente al coche de lujo (que no es nuestro, ni lo ser谩 jam谩s), como si fu茅ramos narcos en d铆a de suerte, cuando en realidad vamos en patinete el茅ctrico… y se nos acaba la bater铆a a medio camino. #AjenoPeroBonito #FinDeMesLlega.

El cl谩sico: "Estudi茅 en [Universidad Top]"… cuando lo 煤nico que hicimos fue pasearnos por su campus una vez de turistas. Pero esa foto frente al edificio es "prueba irrefutable"… hasta que escribes "hubieron muchas personas" en un comentario y tu ortograf铆a te delata como "autodidacta de los memes".

Los selfies "espont谩neos" son otra obra maestra:

En el ba帽o del Burger King ("Aqu铆, filosofando sobre la vida… y las hamburguesas").

En urgencias por un esguince (#SupervivenciaExtrema), pero posando como si fuera un drama de Netflix.

O junto a un contenedor de basura ("Estilo urbano, solo para mentes avanzadas").

En redes, todos somos:
        Cultos (aunque el 煤ltimo libro que tocamos fue el del men煤 del McDonald’s).
        Viajeros (aunque nuestro 煤ltimo viaje fue al pueblo… y nos picaron los mosquitos).
        Exitosos (aunque nuestro mayor logro esta semana fue levantarnos antes de las 12).

Si en Instagram tu vida parece una pel铆cula de Hollywood, pero en la realidad es m谩s bien un telefilm de sobremesa, quiz谩 deber铆as preguntarte: ¿Estoy enga帽ando a los dem谩s… o a m铆 mismo? #ViveLaRealidadNoElFiltro.

Proponemos el siguiente plan VIP:

 · Selfie con la Whopper (filtro "vintage" para que parezca comida casera).

 
· Foto frente al local, fingiendo que es nuestro Ferrari (con el logo de BK de fondo, pa’ darle ese toque de lujo inconfundible).

 
· Subirlo a Instagram con el hashtag #VidaDeInfluencer… mientras mascamos patatas fr铆as con cara de felicidad.


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