-->
LO ÚLTIMO
 
¡Urgente! El Banco de Sangre de Baleares necesita donaciones ❤️ Dona ahora

Y en la Tierra, paz.

Víctor Gistau / Llega el 24 de Diciembre y hasta en las trincheras de los conflictos bélicos callan los cañones, se ponen las armas en descanso y se entrecruzan deseos para la existencia de un tiempo mejor.

Parece como si esa noche obrara el milagro de que los seres humanos llegáramos  a ser precisamente eso… humanos.

Los recuerdos se agolpan de manera desordenada como si unos quisieran arrebatarles a los otros el deseo de ocupar la primera plaza en su salida.

Si es de día, al sol le pedimos explicaciones del porqué se escondió tras alguna nube poco deseada, y si es de noche, hablaremos con el silencio a que nos obliga la poca luz de una luna que juguetea con el resplandor de alguna estrella huida de la galaxia más cercana. Pero es de noche y bendeciremos la suave brisa que acaricia nuestro semblante porque estamos viviendo el balbuceo de una nueva Navidad.

Los villancicos entonan la alegría desde el respeto al mensaje de la Noche Buena y expresan los deseos más dispares pero todos orientados por el mismo camino. Por eso hoy en Planeta Latino Baleares queremos presentarles nuestro tributo al amor y al sentimiento con una música con ritmo de nana que apareció allá por el siglo XVIII sin que se pueda precisar el autor, ni tan siquiera si fue en realidad ese siglo o alguno antes. EL CANT DELS OCELLS, que en castellano leeríamos como EL CANTO DE LOS PAJARITOS es un villancico popular catalán y que ha sido cantado y entonado por muchos interpretes, y musicalizado sin una sola palabra añadida como hizo el maestro Pau Casals mientras se rendía acariciando las cuerdas de su violonchelo.

Valía la pena que les transcribieramos el texto en castellano de como lo entonó en catalán la francesa Mireille Mathie. Síganlo y comprobaran cual es su belleza.

Y la nana arrullando al Niño Dios se convirtió en un verdadero villancico.

Y que el pórtico de la Navidad del año 2024 se abra como les deseamos a todos los habitantes de este mundo con la mayor felicidad para estas fiestas.


Víctor Gistau

 

https://www.researchgate.net/profile/Gloria-Casoliva/publication/325138643/figure/fig3/AS:626362511544321@1526347868868/La-cancion-tradicional-El-cant-dels-ocells-en-una-version-diferente-a-la-tradicional.png

El cant dels ocells (El canto de los pájaros, en castellano)

Al ver despuntar el mayor resplandor en la noche más dichosa,
los pajaritos van a cantarle con su voz melodiosa.

El águila imperial va por los aires, cantando una melodía,
diciendo: Jesús ha nacido para librarnos del pecado y darnos Alegría.

Le responde el gorrión: Esta noche es Navidad, es noche de gran contento.
El verderón y el lugano dicen, cantando también: ¡Oh, qué alegría siento!

Cantaba el pardillo: ¡Oh, qué hermoso y qué bello es el Hijo de María!;
y el zorzal alegre: Vencida está la muerte, ya nace en mi la Vida.

Cantaba el ruiseñor: Es hermoso como un sol, brillante como una estrella.
El colirrojo y la tarabilla celebran la Criatura y su Madre doncella.

Cantaba el reyezuelo para gloria del Señor, inflado de gallardía;
el canario continúa: su música parece del Cielo gran melodía.

Ya entra la totovía diciendo: ¡Pájaros: venid a festejar la aurora!
Y el mirlo, silbando, iba festejando a la más grande Señora.

El carbonero dice: No es invierno ni verano sino que es primavera;
pues que es nacida una flor que por todas da olor y llena la tierra entera.

Cantaba el francolín: Pájaros: ¿queréis venir hoy al amanecer
a ver al gran Señor con su gran resplandor dentro de un establo?

Viene cantando la abubilla: ¡Esta noche ha venido el Rey con más grandeza!
La tórtola y la paloma admiran a todos cantando sin tristeza.

Carpinteros y camachuelos vuelan entre los frutales cantando sus alegrías;
la codorniz y el cuco de muy lejos han venido para contemplar al Mesías.

Cantaba la perdiz: Me voy a hacer el nido dentro de aquel establo,
para ver al Niño como está en brazos de María temblando.

La garza,8​ el charlo y el arrendajo dicen: Ya viene el mayo. Responde el jilguero:
Todo árbol reverdece, toda rama florece, como si primavera fuese.

Susurra el pinzón:9​ Gloria hoy y mañana; siento gran alegría
de ver el diamante tan hermoso y brillante en los brazos de María.

El autillo y el mochuelo, al ver salir el sol, confundidos se retiran.
El cárabo y el búho real dicen: ¡Mirar no puedo!: ¡tales resplandores me admiran!



Publicar un comentario

0 Comentarios

CANCELA TU DEUDA HOY / 600 424 237